El email marketing se ha erigido como uno de los pilares en las estrategias digitales. A pesar que muchos le dan por muerto desde hace años, lo cierto es que a día de hoy esta forma de atracción sigue funcionando… pero ¿Por qué?
En Avippp te describimos las pautas por las que el email marketing bien hecho sí sigue funcionando!
¿El email marketing es intrusivo? Uno de los grandes fallos que se han atribuido a esta forma de contacto ha sido la intrusividad en la bandeja de entrada del usuario…
Este es el primer escalón que se salva y que diferencia entre el email marketing bien hecho y el que no lo está. Cuándo un usuario da su aceptación expresa para entrar en una lista de usuarios con unos intereses comúnes, raramente denunciará ese email como SPAM, sino al contrario, dicha información será bien recibida. Sin embargo, en numerosas campañas de mailing demandadas nos encontramos que lo que muchos clientes piden es envíos masivos a bases de datos. Cuántos más mejor.
Evitando este premisa, haremos que nuestras campañas mediante correo electrónico nunca sean intrusivas. De hecho el email marketing es quizás una de las formas menos intrusivas de llamar la atención sobre los clientes. En la actualidad la mayoría de gestores de correo electrónicos como pueden ser google ya no sólo disponen de categorias para organizar el correo, sino que lo hacen de manera automática. El usuario es libre en decidir cuándo quiere abrir sus correos de promociones e ir abriendo y descartando según seamos de buenos a la hora de llegar con un simple título en el mensaje.
¿Las redes sociales son mejor para contactar? Pues cómo en casi todo… depende cómo lo hagas. Si lo haces de la manera que últimamente venimos denotando nosotros… malo, malo… El escribir directamente en el timeline de una persona o incluso llegar a escribirle mensajes privados por chat ya sea de facebook, whatsapp o dm por twitter… eres considerado de facto un SPAMMER. Responder y meter la nariz dónde no te llaman, tanto de lo mismo; nos referimos a conversaciones privadas entre usuarios entre las que de repente aparece una marca. Nos hemos hartado de explicar que las redes sociales son para conversar y no para atosigar o convertirte en un cartel publicitario zombie 2.0.
El email puede ser tan personal o general cómo la campaña lo demande. Podemos conseguir de una manera mucho más sencilla Leads que de una forma agresiva por las redes sociales. Cada canal tiene sus pecualiaridades e intentar utilizar las de unas en otras no suele funcionar. El utilizar las redes como un refuerzo en una campaña de email marketing suele ser aconsejable, pero por favor… preparar mínimanente la estrategia.
¿Cuántos más mejor? Cómo decíamos antes, aún nos encontramos casi a diario con clientes cuyo único objetivo en las campañas de emailing es enviar al mayor número de objetivos. Sin centrarse apenas en filtros y sin centrarse en ningún otro dato que no sea …. «muchos». Este es quizás uno de los mayores errores que se pueden cometer en las campañas de email. El correcto filtrado en bases de datos selectas y seleccionadas traerá por seguro muchos mejores resultados que los se podrán conseguir enviando a bases de datos de email masivas cuyo interés por nuestra campaña será casi nulo.
En el mercado existen bases de datos para todos los tipos y gustos. Elegir la correcta base de datos y su posterior filtrado se traducirá en el éxito o el fracaso de tu campaña. Sinceramente, si quieres que tu campaña de email sea un asco, compra la más barata y que mayor número de usuarios te proporcione… tendrás el fracaso asegurado. Suponemos que de ahí vendrá la obcecación de muchos por hundir el marketing vía email.
Diseños tipo. Con la universalización de las plantillas en proyectos web, ya sean campañas de email como en páginas web. Se pueden ver campañas por correo electrónico clónicas unas de otra. Ya vendan salchichones o tablets. La receta?
1. Se coge una plantilla gratis
2. Se cambian las fotos
3. Se cambia el título y un poco los textos
4. Se manda a todo lo que se mueva
Ya tenemos una campaña de email marketing al uso en toda regla. Hay una segunda modalidad, que es encargar un diseño que después reutilizaremos hasta la saciedad. Los pocos usuarios que no os hayan metido en la bandeja de SPAM, cada vez que vean vuestro nombre comercial recordarán la bonita campaña que les mandáis todos los meses, semanas o días… y normalmente asociar algo negativo con una marca no da buenos resultados.
Si el título es importante para que abran tu campaña… el sorprender al lector con un diseño distinto y original lo es aún más. Marcará la diferencia entre que lo abran y lo borren a que lo abran y lo lean. Es necesario que además de tener un diseño impecable y atractivo este haya sido diseccionado por un experto en UX. Esa experiencia de usuario es la que además de llamar la atención y conseguir su lectura provocará el resultado esperado de tu campaña. Sea un contacto vía email, formulario, teléfono, etc.
Primero atrae con el diseño y después dirige con tu arquitectura UX.
¿CPL ó CPM? No existe la fórmula perfecta en este aspecto; si bien el CPL exige una mayor involucración y gasto en marketing para que las campañas sean exitosas. Habitualmente el CPL suele ser enviado por agencias con bases de datos masivas, pocos filtros y servicios de telemarketing (los cuáles si los consideramos intrusivos). Las empresas que suelen contratar esta modalidad buscan el máximo ahorro lo que a la larga se convierte en mayor desembolso, pues como indicamos una campaña bien realizada en CPL debe tener unos costes mucho más elevados.
Las campañas de CPM deben tener un ROI superior al CPL; al contratar estas campañas hemos de estar seguros que trabajamos con una base de datos correcta respecto nuestro target y nuestros filtros. ¿En qué se traduce esto? En campañas a colectivos mucho más reducidos pero con una propensión hacia la campaña infinitamente superior al CPL. Por norma estas campañas dependiendo de la BBDD debieran tener un coste superior. De hecho cuándo contrates una campaña de CPM con costes muy bajos, tendrás el resultado esperado… ninguno. He visto campañas realizadas a más de 300.000 contactos alcanzando un único Lead. Y he visto campañas de 2000 contactos con entorno a 500 Leads. Si estas cifras no te hacen pensar por qué nadie da euros a céntimos…
Con estas sencillas aclaraciones, podemos comprobar que aún queda mucho por hacer en email marketing y que realizar campañas muy efectivas es más que posible. También es necesario indicar que en las campañas de email marketing se ha tendido demasiado a buscar la mínima inversión, lo que se ha visto traducido en resultados desastrosos y ello derivó en la muerte anunciada por muchos expertos. Pero se sigue demostrando que hay muchas cuentas que siguen generando oportunidad de negocio mediante estas campañas y quizás por este motivo, nosotros ahora os estemos explicando como utilizar el email marketing para realizar campañas exitosas.
Aclaración de términos para el común de los mortales que no tiene porque ser un experto en marketing:
Lead: Es un término anglosajón que significa tomar la delantera. En marketing por norma se denomina Lead el interés inicial provocado de un usuario. En las campañas de email suele ser habitual contabilizar los Leads cuándo rellenan un formulario.
CPL: Coste por Lead. Es una forma de cuantificar lo que nos cuesta cada Lead creado mediante una campaña de marketing.
CPM: Coste por Mil. Es el coste por cada envío a la cantidad indicada. En este caso un envío a 1000 emails, tendría un coste de 1000€, por ejemplo.
ROI: Es el retorno de inversión. Según el presupuesto invertido, que recuperación hemos tenido con la campaña. Si la campaña nos ha costado 1000€ pero conseguimos vender 2000€, tendremos un ROI de 1000€ contabilizado de forma simple.
UX: Usabilidad web. Es una rama del marketing digital también conocida como arquitectura web, mediante la cuál los expertos organizan la estructura de un diseño digital. Puede ser un email, una página web, landing page, etc.